21/11/2013 - 20:38 | 1 comments
Opcions número 18
per Charli
Vente unas semanas a trabajar a mi granja de cultivo ecológico, a cambio te ofrezco comida y alojamiento ¡Podemos aprender mutuamente de una forma sencilla y barata!
Wwoof – siglas inglesas de Red Mundial de Oportunidades en Granjas Ecológicas– es una red de intercambio entre casas de cultivo ecológico (anfitriones) que necesitan mano de obra y personas (woofers) que quieren aprender más sobre cultivo ecológico, durante sus vacaciones, por ejemplo. Los labradores les dan alojamiento y comida a cambio de algunas horas diarias de trabajo. Aunque, en general, quienes más formación esperan recibir del intercambio son los woofers, siempre se trasmiten conocimientos en ambos sentidos. Los woofers pueden ir solos, en pequeños grupos, en pareja, con o sin niños...
La red Wwoof, que nació para impulsar la agricultura ecológica, no es la única que facilita este tipo de intercambios, pero es seguramente la más extendida y la que ofrece un mayor rango de posibilidades, tanto geográficas como de tipos de fincas.
Hay granjas en las que se practica el woofing, en 63 países. En 22 de ellos existe una red propia nacional que se organiza de forma autónoma, y las casas del resto de países pertenecen a la llamada Wwoof Independents. En España hay más de 200 casas inscritas (no hay red propia).
QUÉ HACE FALTA
– Motivación, ganas de hacer algo distinto.
– Acceso a internet. Saber inglés lo hará más fácil.
– Planificar con bastante antelación.
– Tener claro que vas a trabajar y no a pasar unas vacaciones gratis.
– Ropa de trabajo y, en algunos casos, un saco de dormir y tienda.
– No hacen falta conocimientos previos.
– Información: en la web general de la organización, www.wwoof.org, aparece información básica sobre la red mundial, así como vínculos a las webs de las redes nacionales.
CÓMO HACERLO
A dónde quiero ir
En las webs nacionales, y en www.wwoofindependents.org para Wwoof Independents, encontraremos una descripción de los proyectos o casas que hay en cada país junto con datos como la proximidad a un núcleo urbano, el tipo de alojamiento y de alimentación, el número de días y horas que se trabaja, el número de adultos y niños residentes, etc. A la hora de elegir, es bueno tener claras nuestras motivaciones, es decir, qué buscamos. No olvidemos que puede haber granjas muy distintas.
Para obtener los datos de contacto tenemos que hacernos socios ya sea de la red nacional o bien de Wwoof Independents (si el país no tiene red propia); podemos inscribirnos por correo o bien a través de internet. En el caso de la red general, la cuota es de 25 euros anuales.
Contactar
El siguiente paso es ponernos en contacto con los anfitriones, bien a través del correo electrónico, bien por teléfono o por carta. Lo primero que hay que hacer es presentarnos y solicitar si es posible visitar la casa en las fechas que indiquemos. Es bueno adjuntar toda la información que podamos sobre las motivaciones que nos han llevado a elegir ese proyecto y preguntar todas las dudas que podamos tener: tipo de trabajo (sólo campo o también en la casa, por ejemplo), ritmo (habitualmente son 6 horas, 6 días a la semana), qué hay que llevar, dieta, cómo llegar, si nos vendrán a recoger… En algunos periodos del año y en algunos proyectos, se aglomeran muchas solicitudes a la vez, por lo tanto, cuanto antes planifiques tu viaje y expliques por qué eliges esa casa y qué puedes aportar, más posibilidades tienes de poder visitarla. Si tienes algún requerimiento especial (alergia, enfermedad, dieta, etc.), explícalo.
Espera a que te confirmen que tu solicitud ha sido aceptada, no te presentes por tu cuenta sin avisar o sin haber recibido una respuesta afirmativa.
Qué llevar
En general, se necesita ropa de trabajo (o sea, ropa que no te importe que se estropee), que sea cómoda y se adapte al clima al que te diriges, calzado adecuado, y quizás un saco de dormir. Procura no atiborrarte de cosas, es posible que tengas que caminar con tu mochila.
Durante la estancia
Observa el lugar y a su gente, intenta adaptarte a sus ritmos; no pierdas nunca de vista que estás de visita en la casa de alguien que vive y trabaja allí. Si tienes dudas concretas, relativas a cosas prácticas, acláralas. Además de cumplir con el trabajo encomendado, participa en el día a día (cocinar, limpiar, ordenar...). Es posible que los recursos escaseen más que en una ciudad, no los malgastes.
Tardarás una semana en situarte; al cabo de dos ya gozarás de bastante autonomía; ése es el periodo mínimo para conocer el funcionamiento de un lugar y a su gente.
El trabajo
Intenta adaptarte a los ritmos y necesidades del momento. En el huerto, cada maestrillo tiene su librillo: respeta el del lugar. Si no estás acostumbrado a trabajar con herramientas o máquinas, ten cuidado.
No te impacientes por aprender, se hace camino al andar. Si tienes alguna motivación, interés o conocimientos en especial, compártelos.
No olvides que estás trabajando, incluso si es tu tiempo de vacaciones, ni que te están dedicando tiempo y recursos.
¿CUÁNTO CUESTA?
• La estancia, la comida, el aprendizaje y la experiencia nos saldrán por los 25 euros de la inscripción.
• El proceso para escoger un lugar adonde ir es bastante sencillo. El abanico de ofertas es muy amplio.
• Tendremos que adaptarnos a la realidad del campo y a otras personas.
• Para sacar buen fruto del aprendizaje es conveniente quedarse al menos una semana en la granja.
¿QUÉ GANAMOS?
• Aprenderemos agricultura ecológica.
• Viviremos la experiencia de dar y recibir sin que intervenga el dinero.
• Podremos probar si nos gusta algo que no conocemos sin tener que pagar un dinero por ello.
• Conoceremos la cultura y la realidad que visitamos de primera mano.
• Pasaremos un tiempo en un entorno natural y sano. El mundo rural generalmente enriquece a la persona.
• Potenciaremos una iniciativa que favorece un modelo socioeconómico más igualitario y sostenible.
Comentarios
Hola, me llamo Andrada Bojor
by Invitado - 26 Ago 2015 - 12:04
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