Cuando se nos acaba la tinta de la impresora, seguramente, muchos de nosotros aún pensamos automáticamente en comprar un nuevo cartucho. Esta costumbre nos lleva a llenar los vertederos de todo el mundo con 500 millones de cartuchos de plástico al año; y un cartucho de tinta puede tardar unos 300 años en degradarse. Aquí vemos opciones de impresión mucho más sostenibles ¡y baratas!